Los principios normativos que establece el artículo tercero constitucional, la transformación educativa que alienta el Plan Nacional de Desarrollo y los objetivos señalados en el Programa Sectorial de Educación, constituyen la base rectora para dar sentido y ordenar las acciones de política pública en el sistema educativo nacional.
Para conseguir este objetivo recientemente se dispuso realizar la Reforma Integral centrada en la adopción de un modelo educativo basado en competencias, que responda a las necesidades de desarrollo de México en el siglo XXI. Un modelo educativo democrático. Igual para todos.
Hasta aquí, todo se entiende, pero la realidad es que ninguno de los niños es igual al otro. Cada uno es único e irrepetible; tiene su propia familia, historia, gustos e intereses. Y en medio de esa gran diversidad, hay algunos que exhiben altas capacidades intelectuales; niños que destacan muy por encima de la media. Niños que no forma un grupo homogéneo y, por tanto, no tienen características comunes.
Un grupo invisible.
Y para que la autoridad pueda articular una respuesta educativa adecuada para estos niños "invisibles", requiere tanto de una identificación previa como de una adecuada valoración de sus necesidades educativas.
En este sentido, identificar a niños y niñas como de "altas capacidades intelectuales" no es una tarea que pueda realizarse con la estéril información que aportan pruebas de carácter psicométrico, porque el grave problema de este enfoque basado en el CI, es precisamente la antigüedad de su marco teórico que se fundamenta en el rendimiento académico (potencial de rendir académicamente).
Siendo claros, el resultado de estas pruebas arrojan un resultado único: tu hijo(a) es o NO ES "superdotado". Un simple "etiquetado" inútil que solo provoca daño social e incrementa su segregación. (con todo lo que eso implica)
Porque la realidad supera a la ficción, Cuando un maestro es informado que tal o cual niño(a) es "superdotado" con 130 de CI saltan señales de alarma visual y acústica no solo en el salón de clase, sino en la Dirección del colegio y viene la clásica pregunta:
A tu sano juicio, ¿crees que este alumno(a) tenga rendimiento excepcional?.
Respuesta: NO.
Bueno, Es sobresaliente en inglés pero es hace muy mala letra;es brillante en matemáticas, pero deja mucho que desear en dibujo”; sabe leer y escribir con tres años pero no destaca mucho entre sus compañeros; hace cálculos perfectos con potencias y raíces cuadradas, pero en deportes es pésimo; tiene memoria perfecta y responde rápido, pero no trabaja en clase, no atiende, molesta a sus compañeros y me interrumpe continuamente.
Yo creo que es brillante, pero no superdotado.
El lenguaje GENyo* puente entre niños de Altas Capacidades, maestros y padres.
Afortunadamente ya existen dos bandos, quienes siguen anclados en el CI 130 y los que superado ese antiguo umbral, nos hemos metido en el enfoque cognitivo basado en un "perfil de capacidades hemisféricas", mas operativo y que no resulta tan devastador: el DIAGNOSTICO DE HEMISFERICIDAD CEREBRAL GENyo*, estudio que 'destripa' la información y aporta no solo el perfil y descripción de las Altas Capacidades y de forma sucinta las fortalezas y debilidades de tu hijo(a) sino que también facilita al maestro(a) visualizar que tipo de estimulación requiere conforme a su potencial profesional.
Para que tu hijo(a) contribuya al desarrollo nacional, hace falta algo más que sacar dieces en su boleta de calificaciones; requiere usar...sus Altas Capacidades. Y Altas Capacidades no significa únicamente tener un alto cociente intelectual medible con pruebas específicas, sino que incluyen talento, dotación natural y precocidad.
Tu decide: ¿130 de CI? o ¡Lateralidad cerebral predominante!.
#soygenyo
www.genyo.org
